C ON S U L T A _ M É D I C A _ INTEGRAL

Adriana Marcela Sánchez Otero
Salud Integral Preventiva y Biopsicogenealogía / Terapia Coramai ©

Médica Cirujana Universidad Nacional

Vivir desde el Corazón: Sentir y Crear Vínculos Amorosos, Cuidado Mutuo, Reciprocidad, Escucha Interior, Presencia, Conciencia Corporal y Sabiduría.

domingo, 21 de septiembre de 2014

ÍNTIMOS FLUIDOS

Hace meses y en varias oportunidades me  han  solicitado que escriba sobre un  tema que  aparece  muy  frecuentemente en los encuentros: ¿Es necesario usar  "jabones íntimos"?
Y siempre contesto: Definitivamente No.

Hasta hace unos años,  la única higiene  que las mujeres realizábamos en nuestra zona genital, requería el uso del  mismo jabón del baño corporal. Continuamente llegan y pasan  modas respecto a la  higiene y a veces, no somos  conscientes de los movimientos del mercado.  ¿Notaron cómo una vez disminuyó la de los "baños vaginales" surgió  la de los "jabones íntimos"?

Siempre comienzo  pidiendo  hacer una reflexión. ¿Para que sirve un jabón? ¿qué connotación tiene?  ¿usted querido  lector/lectora lo  ha hecho?  Generalmente,  usar jabón  implica limpiar una zona que se considera sucia, o potencialmente contaminada.  Y particularmente a  lo largo de la historia de ésta sociedad patriarcal,  el cuerpo de la mujer en general y  la zona genital en particular, ha sido  considerada sucia.  No ha pasado  lo  mismo  con  la zona  genital masculina, por supuesto. Para ellos no  hay  opciones de jabón  íntimo, para las mujeres mas de ocho  marcas en el mercado colombiano. Por ahora.

Yo me pregunto ¿De donde ha surgido  dicha cuestión? ¿Qué la sustenta? ¿Qué la promueve? Pues, si  nos ponemos a revisar concienzudamente... cada día la vagina con  su producción de moco, autogenera su  mecanismo de limpieza.

Pero algo esta ocurriendo en  los cuerpos de las mujeres, algo  que unos pocos están  aprovechando  para sacar al mercado  "jabones expertos", "jabones acordes a cada etapa de la mujer".

Y eso que esta  ocurriendo  es tan simple como  su  solución... y  no requiere de un "experto"  para ello. Hombres y  Mujeres, estamos  teniendo  cada vez más frecuentemente eventos de inflamación. Inflamación que obviamente se  manifiesta, según  nuestras propias particularidades corporales.

¿Qué hace que estemos cada vez más inflamados? ¿qué hace que estemos produciendo  mayor cantidad de moco  y variación en el ph de nuestro cuerpo? ¿de nuestras vaginas? indudablemente cualquier respuesta que se dé, está directamente relacionada con  la industrialización de la alimentación.  Está relacionado con  la acidificación de nuestros cuerpos. 

Cada día se consumen  más preservantes, aditivos  y potenciadores, y alimentos procesados en cantidades de más, que  modifican sustancialmente los nichos bacterianos en el cuerpo  y sus respectivos ph. Y nuestra hermosa vagina no se salva de ello.  Ni las  uretras e intestinos...en hombres y mujeres. Es definitivo, científicamente comprobado,  una dieta ácida genera en el cuerpo  la producción de moco...en cualquier mucosa.

¿Qué hacer entonces con  nuestros cuerpos? y particularmente, ¿cómo  ayudarle a nuestras vaginas y vulvas a mantener su  equilibrio? la respuesta  parece  obvia, disminuyendo  la acidez,  pero realmente, ¿es tan fácil?. no siempre. La industria y  las modas de mercado no contribuyen.

El moco  que  produce  la vagina es normal, salvo que sea de mal  olor,  tenga un  color  diferente a blanco lechoso-hialino, o  modifique su cantidad, aunque esto último también depende de las inquietudes y/o prácticas sexuales.  Uno es el  moco lubricatorio, otro el moco depurador.

Si queremos disminuir nuestra producción de moco estas son  algunas prácticas a  realizar:
  • Sólo  usar ropa  interior de algodón, no ajustada, evitando el uso de  panty tipo tanga. 
  • El aseo genital debe ser en dirección antero-posterior.
  • Evitar el uso de "protectores diarios", que al  hacer una continua absorción, resecan la vulva lo que  promueve mayor producción  mucoide en la vagina.
  • La alimentación  diaria debe  contener  2-3 porciones de vegetales y 1-2 de frutas al día.
  • Evitar la ingesta de alimentos con  algún  grado de procesamiento (embutidos, gaseosas, jugos artificiales, comestibles, etc.)
  • Incrementar el consumo de agua y aromáticas. 
  • Consumo de café y  chocolate con  moderación. 
  • Evitar carnes rojas, cerdo, bagre.  Y moderar el consumo de carnes blancas (aves, pescados)
  • No realizar baños vaginales con perilla  u  otros aditamentos. 
  • Propiciar autocuidado y cuidado  mutuo  con  las parejas sexuales. Hombres deben  lavarse las manos con agua y jabón antes de orinar, si sostienen el  pene  para orinar. 
  • Evitar estreñimiento y  fomentar  flora bacteriana intestinal equilibrada. 
  • Realizar depuraciones periódicas de hígado  y colon, con acompañamiento de naturópata, médico(a) o nutricionista. 
  • Revisar creencias y tabúes en torno al tema y  área. No transmitir pautas limitantes ni  hábitos insanos.
  • Y respecto al jabón a usar, evitar los antibacteriales, que sólo deben destinarse a áreas de cuello,  manos y  pies. Para área genital puede usar jabón suave,  por ejemplo de avena, de quinua.
  • Si  siguiendo  estas recomendaciones, continua el excesivo  moco o se presenta moco patológico...consultar con médico/a.